domingo, 13 de junio de 2010
Siempre me han dicho que soy demasiado previsible,que ya se nota el olor a día gris que viene por delante,a pocas ganas de sonrisa mañanera,poca vida,que la reina de las palabras se ha quedado hoy sin nada que aportar,que se nota demasiado rápido cuando se me inundan los ojos y voy a romper a llorar,y es precisamente ese presentimiento el que me dice religiosamente que esta vez,para no variar,va a ser irrefrenable.
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no creo que seas previsible, será más bien que hay alguien que te conoce demasiado.
ResponderEliminarA mi es que me agrada esa faceta de ser observador para luego ver como actúa la gente en su día a día, pero no creo que por ello ya son muy previsibles... sino que tras cierta dedicación a la observación de una persona se le va viendo esa linealidad en su día a día que lo hace ser previsible, pero no más ni menos sino que a unos se les presta más atención que a otros.
no se si se entiende pero, todavía no capto cuando quieres llorar, si quieres llorar dímelo, yo te enseño.
querer no quiero... es algo que llega y no puedes frenar,pero acepto las clases.
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